4 ventajas de la Ley de Prestaciones Alimentarias para tu empresa

Uno de los puzzles más complicados a los que se enfrentan los departamentos de Recursos Humanos consiste en encajar dos piezas en teoría contradictorias: ofrecer un alto nivel de calidad de vida laboral a los colaboradores y no aumentar los sobrecostos laborales en la implementación de las medidas. En el Perú, la respuesta a este reto se encuentra en la Ley 28051 de Prestaciones Alimentarias.

Con esta normativa, las empresas tienen una herramienta perfecta para conceder a los colaboradores un beneficio de prestaciones alimentarias que mejora sus ingresos mediante vales y tarjetas de alimentos y, a la vez, optimizan el presupuesto destinado a la planificación salarial de la compañía.

A continuación te presentamos las cuatro ventajas principales de la Ley de Prestaciones Alimentarias:

1. La empresa ahorra en sobrecostos laborales

Los empleados no son los únicos beneficiados de las prestaciones alimentarias. Gracias a esta ley, una empresa en el Perú puede mejorar la remuneración de un colaborador y ahorrar en la implementación hasta un 49% de los sobrecostos laborales.
De este modo, el departamento de Recursos Humanos podrá usar el 100% del presupuesto para la planificación salarial.

2. Adecuación a la estrategia de la empresa

Las empresas pueden decidir cómo van a usar las tarjetas de alimentación según la estrategia que estén implementando. La polivalencia en su uso permite que se destinen para atraer el mejor talento; realizar aumentos salariales; afrontar la reestructuración salarial en los nuevos contratos; establecer bonos de productividad o diseñar planes de incentivos.

3. Pagar mejor al colaborador sin tener que pagar más

Una de las grandes ventajas de la Ley de Prestaciones Alimentarias es mejorar el poder adquisitivo de los empleados con conceptos no remunerativos. Gracias a la exención fiscal, los colaboradores pueden recibir más dinero neto en productos y servicios que mejoren su calidad de vida sin que suponga un aumento de los gastos salariales para la empresa.

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4. Mejora la calidad de vida del colaborador

Con las prestaciones alimentarias, el trabajador ve cómo su capacidad adquisitiva y la de su familia mejoran ya que recibe el importe total de la remuneración en forma de vales de alimentos sin descuentos y sin que afecte a su AFP.
Además, mejora su calidad alimenticia ya que el uso de estos vales es exclusivo para la realización de compras de alimentos en supermercados, restaurantes, bodegas y en aquellos establecimientos que acepte el pago de tarjeta vía POS.
La otra ventaja de las prestaciones alimentarias, es que permite optimizar el gasto familiar, ya que conoce con exactitud qué ingresos tiene para la canasta de alimentación.

En definitiva, implementar la Ley de Prestaciones Alimentarias en la empresa motivará más a los empleados y su productividad será mayor sin que ello suponga un incremento en el presupuesto destinado a la planificación salarial.
 

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